Callados los sueños, percutiendo huesos rotos dentro de mi cabeza
Restos de algo sin igual, quién llamase amor
Decayendo cada vez más, goteando en mis manos
Sin poder sostener ni una gota
Siendo que se evaporan en esta realidad
Entre los brazos que sostuvieron alguna vez tu llanto
En las manos que secaron alguna vez tu ira
Al mismo suelo se caen, todas aquellas cosas
Que nunca formarán parte de una historia
Que nunca se harán realidad...
Cada conversación corta mis alas
Cada mirada, atrapa mis sueños
Cada palabra golpea como un niño
Las paredes de un lindo hogar
De colores con sabor a pastel
Y con dulces flores, llenas de nosotros
Tal vez jamás debamos viajar
Tan lejos como para creer ser felices
Seamos parte de un nada, un nada bello
Sin temor a caer, sin temor a creer otra vez
Para poder volar así, con un par de alas fuertes
Coloreadas con plumas...
Hoy volví a creer que hallaría aquel hogar
Volví a encontrar el camino
O por lo menos eso creía, hasta que desperté
Y supe que no existías.
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